Selecciona tu idioma / Selected languaje

lunes, 24 de octubre de 2011

Tratar la presbicia sin anteojos ni cirugía

La presbicia, es la dificultad en la visión cercana, para leer y realizar tareas manuales, y afecta por igual a hombres y mujeres a partir de la cuarta década de vida. Hoy se puede resolver con gotas, lo cual evita la cirugía y el uso de anteojos. 30% de la población la padece.
La presbicia no es una enfermedad, sino una situación que aparece con la edad. “Es la disminución en la capacidad de modificación o acomodación del cristalino, una lente que está adentro del ojo, para ver bien de cerca. Es una deficiencia natural de la visión en la especie humana, que aparece con la edad y afecta al 30% de la población mundial”, explica la Dra. Anahí Lupinacci, oftalmóloga del Hospital Universitario Austral.
Desde hace siglos, la presbicia se trata con anteojos. En los últimos años se incorporaron distintos tipos, así como lentes de contacto y técnicas quirúrgicas, para encontrar una solución práctica según la necesidad de cada paciente, pero ninguna de estas es un remedio definitivo.
“Ahora existe un tratamiento con gotas oftálmicas para mejorar la capacidad de acomodación y la visión en forma permanente –destaca la Dra. Lupinacci–. Evita el uso de los anteojos y retrasa la cirugía al menos hasta que aparezcan otros trastornos fisiológicos relacionados con la edad, como catarata. El tratamiento es efectivo mientras que el cristalino no se ponga rígido (catarata), que podría ser a partir de los 65 años”.
Este método, conocido como Método Benozzi, consiste en un colirio inventado por el Dr. Jorge Benozzi. Contiene dos drogas mezcladas: un antiinflamatorio no esteroide y una sustancia que estimula un músculo pequeño dentro del ojo, el músculo ciliar, que es el encargado de hacer los cambios necesarios del cristalino para poder enfocar. Este colirio se prescribe mediante receta magistral, ya que aún no se comercializa de manera industrial.
“El 80% de los pacientes con presbicia pueden reemplazar sus anteojos con este tratamiento. Deben administrarse entre una y tres gotas diarias de colirio, según el caso”, aclara la oftalmóloga.
Para beneficiarse de esta terapia, es imprescindible hacer una revisión oftalmológica previa muy minuciosa, para determinar si la persona es apta para el uso del colirio. Los pacientes operados de cataratas, los miopes de más de 2 dioptrías o todos aquellos que tengan alguna otra patología ocular (exceptuando glaucoma o hipertensión ocular), como maculopatías, retinopatías, desprendimiento de retina, entre otros, no podrán aplicarse estas gotas para la presbicia.
La presbicia no es una enfermedad, sino una situación que aparece con la edad. “Es la disminución en la capacidad de modificación o acomodación del cristalino, una lente que está adentro del ojo, para ver bien de cerca. Es una deficiencia natural de la visión en la especie humana, que aparece con la edad y afecta al 30% de la población mundial”, explica la Dra. Anahí Lupinacci, oftalmóloga del Hospital Universitario Austral.
Desde hace siglos, la presbicia se trata con anteojos. En los últimos años se incorporaron distintos tipos, así como lentes de contacto y técnicas quirúrgicas, para encontrar una solución práctica según la necesidad de cada paciente, pero ninguna de estas es un remedio definitivo.
“Ahora existe un tratamiento con gotas oftálmicas para mejorar la capacidad de acomodación y la visión en forma permanente –destaca la Dra. Lupinacci–. Evita el uso de los anteojos y retrasa la cirugía al menos hasta que aparezcan otros trastornos fisiológicos relacionados con la edad, como catarata. El tratamiento es efectivo mientras que el cristalino no se ponga rígido (catarata), que podría ser a partir de los 65 años”.
Este método, conocido como Método Benozzi, consiste en un colirio inventado por el Dr. Jorge Benozzi. Contiene dos drogas mezcladas: un antiinflamatorio no esteroide y una sustancia que estimula un músculo pequeño dentro del ojo, el músculo ciliar, que es el encargado de hacer los cambios necesarios del cristalino para poder enfocar. Este colirio se prescribe mediante receta magistral, ya que aún no se comercializa de manera industrial.
“El 80% de los pacientes con presbicia pueden reemplazar sus anteojos con este tratamiento. Deben administrarse entre una y tres gotas diarias de colirio, según el caso”, aclara la oftalmóloga.Para beneficiarse de esta terapia, es imprescindible hacer una revisión oftalmológica previa muy minuciosa, para determinar si la persona es apta para el uso del colirio. Los pacientes operados de cataratas, los miopes de más de 2 dioptrías o todos aquellos que tengan alguna otra patología ocular (exceptuando glaucoma o hipertensión ocular), como maculopatías, retinopatías, desprendimiento de retina, entre otros, no podrán aplicarse estas gotas para la presbicia.
Fuente: http://medicablogs.diariomedico.com/ Hospital Universitario Austral

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...