Astigmatismo: cuando el ojo no refracta la luz

Si en alguna oportunidad usted ‘medio’ cerró los ojos o guiñó uno de ellos para poder enfocar lo que observaba pues veía una imagen borrosa o distorsionada, sepa que usted padece posiblemente de astigmatismo.

El astigmatismo es un problema en la curvatura de la córnea, que impide el enfoque claro de los objetos cercanos y lejanos. Esto se debe a que la córnea, en vez de ser redonda, se achata por los polos y aparecen distintos radios de curvatura en cada uno de los ejes.

El oftalmólogo Alejandro Valero, de la Clínica de Ojos, en Maracaibo, explica que la córnea es “el primer lente del sistema óptico del ojo. En este caso, en vez de tener una curvatura igual en todos sus meridianos, la tiene diferente, lo que causa que los rayos de luz se enfoquen en puntos distintos de la retina, dando origen a una visión borrosa”.

Esta enfermedad es hereditaria —por eso no existe prevención posible— y se diagnostica fácilmente por medio de un examen oftalmológico estándar con una prueba de refracción.

“Acostumbraba a visitar anualmente al oftalmólogo para chequearme la vista, pues uso lentes desde los diez años. Cuando cumplí 18, dejé de ir por dos años. De repente, en pleno examen, el doctor me pidió describir con cuál lente veía más nítida la letra ‘O’. Probó con varios, y tardé mucho en poderla enfocar. Al final me dijo: ‘¿cuando estudias o usas mucho el computador te cansas?. Le dije que sí. Me dijo: ‘Sufres de astigmatismo”, cuenta Paúl Marcano, estudiante de ingeniería civil.

Isabel Montero, exjefa del servicio de oftalmología del Hospital Universitario de Maracaibo, expresa en palabras más comunes que “esto sucede cuando el globo ocular pierde su forma original de esfera y se convierte en un balón. Tiene ejes paralelos a 90 y 180 grados, y ejes oblicuos. Por lo general las personas tienen cansancio visual y fatiga en horas de la tarde”.

La sintomatología más frecuente del astigmatismo es la percepción de las imágenes distorsionadas. Sin embargo, a menudo puede causar dolores de cabeza o molestias oculares. Además, dependiendo de la edad, de la cantidad y del tipo de astigmatismo los síntomas pueden ser distintos, e incluso, no afectar a la visión.

De las consultas oftalmológicas, Montero asegura que el 40% de los pacientes presenta astigmatismo.

El problema se reduce con el uso de lentes y puede cambiar con el tiempo, lo que requiere nuevos anteojos o lentes de contacto. Sin embargo, existe la opción quirúrgica, llamada cirugía refractiva, para aquellos que superen 2,50 de astigmatismo y presenten al mismo tiempo miopía o hipermetropía.

Se trata de la técnica del Excimer Laser, el “tratamiento quirúrgico que más se utiliza para corregir los defectos anatómicos relacionados con el enfoque de la imagen, como son la miopía, principalmente; así como la hipermetropía y el astigmatismo, y, así, eliminar la dependencia de los lentes”, según indica Ricardo Galué D’Jesús, experto zuliano en cirugía refractiva y facoemulsificación de catarata.

Los especialistas explican que durante el procedimiento se estudia la córnea y según los cálculos, se retira cierta cantidad del epitelio corneal con el láser para quitar el astigmatismo.

Si considera que pudiera estar sufriendo de esta patología, lo más recomendable es acudir pronto al médico.

Fuente:
http://www.panorama.com.ve/portal/app/vista/detalle_noticia.php?id=50716