Aneris Casassus
Especial para Clarín
Largas horas en el trabajo frente a la computadora. Después, camino a casa, revisamos mails y mensajes del celular desde esa pantalla diminuta en el ajetreo del colectivo o del subte. Cuando al final llegamos, prendemos la tele para mirar alguna película u otra vez la compu, ahora ya no para trabajar sino para entretenemos un rato buscando algo que nos divierta. Casi sin darnos cuenta, cada vez pasamos más tiempo del día frente a monitores y pantallas. Y nuestros ojos nos pasan factura.
En el último tiempo, las consultas oftalmológicas por fatiga visual se incrementaron considerablemente. Los pacientes llegan al consultorio con síntomas como visión borrosa, sensación de arenilla en los ojos, dolor en los párpados, cefaleas, ojos colorados o seborrea en las pestañas. "Desde hace muchos años vienen aumentando las consultas por estos casos. La llegada de la computadora a casi todas las profesiones ha generado que esta sintomatología sea mucho más frecuente. La computadora genera una fatiga en nuestro estado de atención. Casi ni queremos parpadear para no perdernos nada de lo que sucede en la pantalla", explica el doctor Gustavo Bodino, secretario del Consejo Argentino de Oftalmología.
Cuando aparece, hay que consultar con el médico para descartar alguna enfermedad previa.
El término médico para definir la fatiga visual es la astenopia, que es la respuesta del ojo frente al esfuerzo muscular excesivo durante un largo período de tiempo. "La astenopia en el individuo que no tenga ningún problema visual viene de la mano del exceso de trabajo. Si caminas mucho, al final tenes fatiga muscular. Con los ojos pasa exactamente lo mismo", dice el doctor Julio Manzitti, ex jefe de oftalmología del Hospital Garrahan. "Este fenómeno aumenta en las personas que están en movimiento, por ejemplo quienes leen en el colectivo o en el auto. Eso modifica la distancia de los ojos al papel y para lograr foco el ojo trabaja más".
La astenopia suele presentarse con mayor anticipación en aquellas personas que tienen algún problema visual. "Es común que aparezca en niños y adolescentes que tengan astigmatismo e hipermetropía -dos formas en las que el ojo no puede enfocar nítidamente las cosas- y que no estén usando el anteojo necesario. También puede deberse a una dificultad para mantener los ojos alineados en forma correcta. Es decir, uno de los ojos puede tener una tendencia a desviarse y la persona está haciendo un esfuerzo permanente para mantenerlo derecho", apunta el doctor Eduardo Mayorga, jefe de oftalmología del Hospital Italiano.
En los adultos, las dos causas más frecuentes son la aparición de la presbicia -la dificultad para enfocar objetos cercanos que comienza alrededor de los 40 años- y el llamado síndrome de ojo seco, donde una alteración en la lubricación del ojo genera las molestias.
Por eso, dicen los especialistas, la primera recomendación es hacer la consulta oftalmológica para descartar que no haya otro problema visual y la necesidad de usar anteojos recetados. Luego, si no se detecta ninguna patología previa, se pueden incorporar ciertos hábitos para disminuir el cansancio en los ojos. Si se realizan trabajos extensos de lectura o en la computadora, se recomienda levantar la vista cada 30 o 40 minutos y parpadear varias veces en una frecuencia alta. Porque cuando el ojo tiene un estado de atención prolongado parpadea menos y se lubrica mal. Por eso también es importante que los lugares de trabajo tengan un nivel de humedad normal. En caso contrario, se sugiere el uso de gotas de lágrimas artificiales cada una o dos horas en cada ojo.
Síntomas
• La fatiga visual es un cuadro muy molesto para quien lo sufre, pero reversible y tambien prevenible. Estos son sus principales síntomas, por los que conviene consultar con un oftalmólogo.
• Visión borrosa y dificultades para leer en la pantalla.
• Sensación de arenilla en los ojos.
• Ojos irritados.
• Seborrea en las pestañas.
• Dolor en los párpados.
• Cefaleas.
Consejos para prevenirla
• Consultar al oftalmólogo en formar periódica y usar los anteojos que éste recomiende, no otros.
• Cuando se está trabajando, leyendo o mirando una pantalla, descancar la vista cada 30 o 40 minutos.
• Al descansar la vista, parpadear varias veces en una frecuencia alta.
• La luz es muy importante. Por eso, optimizar la iluminación del campo visual y del lugar de trabajo habitual.
• Mantener los ojos lubricados con gotas de lágrimas para evitar la sequedad.
• Sentarse adecuadamente y a la distancia y altura adecuadas. Medio metro de la pantalla y a la altura de los ojos.
• Colocar todo el material de trabajo tan cerca de la pantalla como sea posible para minimizar los movimientos de la cabeza y de los ojos, y también los cambios de enfoque.
Fuente: Diario Clarín
Aneris CasassusEspecial para Clarín
Largas horas en el trabajo frente a la computadora. Después, camino a casa, revisamos mails y mensajes del celular desde esa pantalla diminuta en el ajetreo del colectivo o del subte. Cuando al final llegamos, prendemos la tele para mirar alguna película u otra vez la compu, ahora ya no para trabajar sino para entretenemos un rato buscando algo que nos divierta. Casi sin darnos cuenta, cada vez pasamos más tiempo del día frente a monitores y pantallas. Y nuestros ojos nos pasan factura.
En el último tiempo, las consultas oftalmológicas por fatiga visual se incrementaron considerablemente. Los pacientes llegan al consultorio con síntomas como visión borrosa, sensación de arenilla en los ojos, dolor en los párpados, cefaleas, ojos colorados o seborrea en las pestañas. "Desde hace muchos años vienen aumentando las consultas por estos casos. La llegada de la computadora a casi todas las profesiones ha generado que esta sintomatología sea mucho más frecuente. La computadora genera una fatiga en nuestro estado de atención. Casi ni queremos parpadear para no perdernos nada de lo que sucede en la pantalla", explica el doctor Gustavo Bodino, secretario del Consejo Argentino de Oftalmología.
Cuando aparece, hay que consultar con el médico para descartar alguna enfermedad previa.
El término médico para definir la fatiga visual es la astenopia, que es la respuesta del ojo frente al esfuerzo muscular excesivo durante un largo período de tiempo. "La astenopia en el individuo que no tenga ningún problema visual viene de la mano del exceso de trabajo. Si caminas mucho, al final tenes fatiga muscular. Con los ojos pasa exactamente lo mismo", dice el doctor Julio Manzitti, ex jefe de oftalmología del Hospital Garrahan. "Este fenómeno aumenta en las personas que están en movimiento, por ejemplo quienes leen en el colectivo o en el auto. Eso modifica la distancia de los ojos al papel y para lograr foco el ojo trabaja más".
La astenopia suele presentarse con mayor anticipación en aquellas personas que tienen algún problema visual. "Es común que aparezca en niños y adolescentes que tengan astigmatismo e hipermetropía -dos formas en las que el ojo no puede enfocar nítidamente las cosas- y que no estén usando el anteojo necesario. También puede deberse a una dificultad para mantener los ojos alineados en forma correcta. Es decir, uno de los ojos puede tener una tendencia a desviarse y la persona está haciendo un esfuerzo permanente para mantenerlo derecho", apunta el doctor Eduardo Mayorga, jefe de oftalmología del Hospital Italiano.
En los adultos, las dos causas más frecuentes son la aparición de la presbicia -la dificultad para enfocar objetos cercanos que comienza alrededor de los 40 años- y el llamado síndrome de ojo seco, donde una alteración en la lubricación del ojo genera las molestias.
Por eso, dicen los especialistas, la primera recomendación es hacer la consulta oftalmológica para descartar que no haya otro problema visual y la necesidad de usar anteojos recetados. Luego, si no se detecta ninguna patología previa, se pueden incorporar ciertos hábitos para disminuir el cansancio en los ojos. Si se realizan trabajos extensos de lectura o en la computadora, se recomienda levantar la vista cada 30 o 40 minutos y parpadear varias veces en una frecuencia alta. Porque cuando el ojo tiene un estado de atención prolongado parpadea menos y se lubrica mal. Por eso también es importante que los lugares de trabajo tengan un nivel de humedad normal. En caso contrario, se sugiere el uso de gotas de lágrimas artificiales cada una o dos horas en cada ojo.
Síntomas• La fatiga visual es un cuadro muy molesto para quien lo sufre, pero reversible y tambien prevenible. Estos son sus principales síntomas, por los que conviene consultar con un oftalmólogo.
• Visión borrosa y dificultades para leer en la pantalla.
• Sensación de arenilla en los ojos.
• Ojos irritados.
• Seborrea en las pestañas.
• Dolor en los párpados.
• Cefaleas.
Consejos para prevenirla• Consultar al oftalmólogo en formar periódica y usar los anteojos que éste recomiende, no otros.
• Cuando se está trabajando, leyendo o mirando una pantalla, descancar la vista cada 30 o 40 minutos.
• Al descansar la vista, parpadear varias veces en una frecuencia alta.
• La luz es muy importante. Por eso, optimizar la iluminación del campo visual y del lugar de trabajo habitual.
• Mantener los ojos lubricados con gotas de lágrimas para evitar la sequedad.
• Sentarse adecuadamente y a la distancia y altura adecuadas. Medio metro de la pantalla y a la altura de los ojos.
• Colocar todo el material de trabajo tan cerca de la pantalla como sea posible para minimizar los movimientos de la cabeza y de los ojos, y también los cambios de enfoque.
• Visión borrosa y dificultades para leer en la pantalla.
• Sensación de arenilla en los ojos.
• Ojos irritados.
• Seborrea en las pestañas.
• Dolor en los párpados.
• Cefaleas.
Consejos para prevenirla• Consultar al oftalmólogo en formar periódica y usar los anteojos que éste recomiende, no otros.
• Cuando se está trabajando, leyendo o mirando una pantalla, descancar la vista cada 30 o 40 minutos.
• Al descansar la vista, parpadear varias veces en una frecuencia alta.
• La luz es muy importante. Por eso, optimizar la iluminación del campo visual y del lugar de trabajo habitual.
• Mantener los ojos lubricados con gotas de lágrimas para evitar la sequedad.
• Sentarse adecuadamente y a la distancia y altura adecuadas. Medio metro de la pantalla y a la altura de los ojos.
• Colocar todo el material de trabajo tan cerca de la pantalla como sea posible para minimizar los movimientos de la cabeza y de los ojos, y también los cambios de enfoque.
Fuente: Diario Clarín
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